Si se me clavan las dudas,
me quedaré desarmado,
planeando lo imposible
porque yo te sigo amando.
Mientras quede la esperanza
de ese sueño imaginario,
fortaleceré mi empeño
para esperar el milagro
de tu voz en mis oídos
en algún lugar cercano.
Recuperar tu palabra
es ahora mi trabajo;
y resulta más difícil
que mis versos a diario.
Pasa el tiempo en tu silencio
para borrarse en mi espacio.
Va creciendo la certeza
de que tú te has alejado
de manera terminal
de este sueño tan preciado.
Mas permanecen las dudas
del corazón derrotado,
que aún guarda la ilusión,
que aún te extraña tanto.
Y mientras existan las dudas,
yo m quedaré a tu lado,
dentro de mi pensamiento,
el soñar que no hace daño
lunes, 19 de enero de 2009
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