jueves, 8 de enero de 2009

SONETO XXXIV "Ese verso"

Cuando hasta la verdad te habla y te engaña,
cuando ese verso se niega a salir
y se escuda en la nada para huir,
te deja solo, hirviendo en la migraña.

Con el alma tan rota y tan huraña
y que sólo piensa en escribir
la amargura que no quiere partir
en el verso que me duele y me daña.

Ese verso, repleto de fonemas
va a salir, juró que al final saldrá
aunque deba destrozar mis esquemas

Ese verso, el veneno sacará
de este alma que ha quedado sin emblemas
sabiendo que por fin, descansará...