martes, 31 de agosto de 2010

SONETO LXXXVI "Eres"

Eres el mar dormido que me muerde,
eres el agua limpia que se estanca,
eres ese dolor de risa franca,
la piedra del bastión, mi bosque verde.

Eres tú mi tesoro y que se pierde
entre cruel espina y rosa blanca.
Eres tú mi ilusión de mano manca
si nada en ti quedó que me recuerde.

Eres la soledad que trajo ruido
a la voz de la noche solitaria
que me había atrapado en el olvido.

Eres mi amiga grande y mi adversaria,
eres volver a ser lo que ya he sido,
mi leyenda de amor no legendaria...