Rechazo los tesoros amarillos
por las suaves caricias de tus dedos,
por el leve derrumbe de mis miedos,
sueños del corazón que son sencillos.
Porque quiero a tus ojos y sus brillos
cuando cae la tarde en los viñedos.
Porque a tu lado nacen nuevos credos
y tu voz me ha sacado los cuchillos.
Se va el dolor si lo tocan tus manos
del alma de silencio sostenido
que hablarán cuando lleguen los veranos.
Este amor con el tiempo se ha crecido
al son de corazones tan cercanos,
porque tú todavía no te has ido.
miércoles, 29 de septiembre de 2010
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Las caricias de una mano amiga o amada a veces son curas mil veces mejores que las medicinas.
ResponderEliminarMe encanta, como siempre, todo lo que sacas de tu pluma.
Un beso
Incluso hay veces que reconforta más una caricia que las mismas palabras para el dolor del espíritu ¿verdad? Muchas gracias Ana. por tus palabras.
ResponderEliminarUn besito y que tengas un buen día.
Es tan cierto que a menudo una caricia, una sonrisa, una mirada sincera y arrebolada nos proporcionan más paz y dicha que cualquier otro bien material...
ResponderEliminarY sin embargo la mayoría de la gente parece no darse cuenta del enorme tesoro que albergan las cosas sencillas, el calor de un simple gesto... y a menudo pretenden comprar afectos mediante promesas vanales y materiales.
Besos y feliz día
"Y tu voz me ha sacado los cuchillos..."
ResponderEliminarqué hermoso.
El amor verdadero puede curar las heridas más profundas. Y mientras esté con nosotros,
¿Qué hemos de temer?
El poder regenerador del amor es inexplicable y mágico y es cierto que a veces, un abrazo, una caricia, un beso, nos hacen más bien y son más certeros qué mil palabras. En el fondo somo seres sensitivos también.
ResponderEliminarPrecioso mi poeta, como siempre.
Besos.
Mi querida Akasha, este es el mundo que hemos hecho... rodeados de "comodidades" donde ser feliz se supone más sencillo. Lo que ocurre, como ocurre con todo lo material, es que faltan conceptos exclusivamente humanos, como por ejemplo una caricia. Yo no suelo prometer nada por eso mismo, siempre ocurre algo para que no se pueda cumplir esa promesa. Hoy pienso así, mañana ¿quién sabe? Pero parece claro que un acto de cariño, un acto de amistad, supone un proceso de regeneración ante los malos momentos.
ResponderEliminarGracias, mi bella dama por su visita. Un beso enorme.
Mi querida Elenaor, está usted ante un completo sin remedio que por realista, es pesimista. ¿Qué hay que temer? Posiblemente, perderlo. Lo que ocurre, es que en la práctica, uno debe aprender a dejarse llevar, a vivir el presente, tal y como le he dicho a mi querida Akasha, quién sabe lo que pueda ocurrir en el futuro. Si se es feliz hoy, hay que absover hasta la última gota de esa sensación. Muchas gracias por su visita. Un beso.
Mi querida Princesa Amidala. "El alma de silencio sostenido" pide, ante la falta de palabras que a veces consiguen más que confundir, "una caricia de unos dedos" desinteresados. Son actos de regeneración constante. Muchas gracias por tu visita, como siempre. Un beso enorme.