Ya no eres como antes eras,
mujer con alma de niña.
He sentido la nostalgia
de aquellos días sin prisa,
donde contabas estrellas
de luces que ya no miras.
¿Qué es lo que ha sido de ti,
de tu encanto y tu sonrisa?
Es que ya no queda nada
en tu alma de esa niña,
que conquistó a mis ojos
la noche de luna tibia.
¿Qué ha sido de los cuentos
de tus bosques y tus ninfas?
En tus ojos no se enciende
esa luz de fantasía,
quedándose en tu mirada
reproches, palabras frías...
¿Dónde han ido nuestros sueños
que volaban con la brisa
y rompían las fronteras
de cualquier melancolía?
Qué es lo que ha sido de ti,
por qué ya no necesitas
esos cantos de los bosques
que llenaban a tu vida.
Dime qué será de mí
deshojando margaritas,
cuántas lunas no veremos
como antes tú lo hacías.
Hoy me ahogo en el desierto
que de arena se vacía.
Hoy me ahogo en las burbujas
que tus labios me escribían.
Hoy se rompieron los lazos
que a nosotros nos unían.
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¡Qué preciosidad! Me ha encantado, me ha sonado triste, y ya sabes como me pierden esos poemas melancólicos que escribes. Es una pena cuando perdemos la inocencia y la alegría infantil que con poca cosa se contenta y mucho agradece.
ResponderEliminarUn beso
Este romance me ha puesto triste y melancólica, no quiero decir que no me guste, sólo que me tocó la fibra.
ResponderEliminar¿Representa la pérdida de ilusión? o ¿la pérdida de ese niño que todos llevamos dentro?, ¿esa pérdida de ingenuidad propia de la edad?, no sé...¿quizá yo vea más de lo que hay?
¿Dónde han ido nuestros sueños...? Dime qué será de mí...quien tuviera esas respuestas ¿verdad?
Un besito mucho_que_contar.
Mi querida Ana, llevaba un tiempo sin hacer uno de los míos... He buscado palabras para hacerlo más desgarrador, me apetecía volver a los orígenes... El tiempo pasa y hay gente que cambia, y puede que esos cambios no sean para bien, siempre en opinióm subjetiva... Más o menos es lo que trata la historia. Su amada ha cambiado, lo que antes era una contemplación cómplice, hoy ya no es de su agrado y lamenta este hecho.
ResponderEliminarUn beso.
Mi querida Princesa Amidala, sí, esos detalles que no me terminaban de convencer era eso, no sonaba contundente. Unos cambios y más o menos he conseguido que suene como quería. Lo ves todo perfectamente. Se cuenta esa pérdida de los sentimientos que afloraban en compañia ante una puesta de sol, el sonido de las olas del mar... Quizá propiciado por la rutina, quizá por no regar la planta a diario y dejar que se seque, quizá porque las ambiciones pueden llegar a ser peligrosas si se pierde la humildad...
Tienes razón; esas preguntas seguramente quedarán sin respuesta, una lástima ya que ahorraría dolor.
Un besito grande y vuelvo a desearte una feliz semana.
Sin duda las personas vamos cambiando con el paso del tiempo, y el ser que caminaba a nuestro lado y que tal vez teníamos idealizado no iba a ser menos. Resulta muy triste, lamentable, de repente mirar esos ojos que llevabas años mirando y de pronto no descubrir nada en ellos, sino vacío, unas órbitas sin duda carentes de esa vida y expresividad que nos hacía vibrar. O quizás seamos nosotros los que cambiamos y nos vamos haciendo cada vez más exigentes... no sé.
ResponderEliminarLa rutina, sin duda, es un mal terrible para cualquier relación y, como tú dices es una frágil planta que hay que cuidar a diario, y no sólo cuando se ve deteriorada.
Besos amigo mío y feliz inicio de semana (para mí felizmente más corta...)
Hay una frase dicha por un personaje de una película de género romántico que se me quedó grabada, que parafraseada es algo como esto:
ResponderEliminar"asegúrate de que realmente amas al hombre con el que te vas a casar, porque mientras sois jóvenes, el fuego de la pasión os consume. Pero el día que las canas cubran vuestras cabezas, la pasión se esfumará, y lo único que os quedará será el amor".
Es duro ver cómo nuestra ilusión se esfuma, y vemos que la persona a la que amamos no es como creíamos. Es ahí donde nuestros sentimientos son probados.
Precioso romance, amigo.
Mi querida Akasha, me alegro que esta semanita sea más corta para ti y que puedas descansar. Pienso que uno sabe si cambia, aunque diga que no. SI antes, cuatro ojos veían un atarecer y vibraban con ello, si ahora sólo quedan dos... pues creo que el el que cambia se ve claro. Hay también quien se una a alguien que opuesto y el que cambie sea uno mismo, perdiendo esas creencias y dejando de creer en lo que se creía. La historia no es más que un simple lamento de alguien que viviendo pequeños detalles junto a alguien y que ese alguien, por el motivo que sea, ya no los comparte.
ResponderEliminarUn beso enorme Akasha, gracias.
Mi querida Eleanor A. A Paulo Coelho le leí que es mejor aceptar que esperar. Lo que ocurre es que no estamos hechos para aceptar sin medidas y si hay alguien que lo hace, creo que será infeliz. Es cierto, la pasión se esfuma, las mariposas en el estómago de los inicios se esfuma, la ilusión de tener a alguien a nuestro lado se esfuma igualmente. Luego sólo queda un cariño cómplice que mantiene esa relación cuya pasión inicial ha menguado. Pero ¿y si no queda ese cariño? ¿Y si esos detalles que hacen de esa unión algo agradable ya no resultan en uno de los dos? Si "antes contabas estrellas de luces ya no miras" es un nexo menos en común que compartir y por tanto, pienso yo, un alejamiento.
Le agradezco sus palabras y celebro que le haya gustado. Un saludo.